A PESAR DE TENER UNA SENTENCIA INTERNACIONAL CONDENATORIA, EL ESTADO MEXICANO NO MUESTRA VOLUNTAD POLÍTICA PARA CUMPLIR CABALMENTE CON LA SENTENCIA, INVESTIGAR EL PARADERO DE ROSENDO NI DE LOS MILES DE DETENIDOS DESAPARECIDOS EN MÉXICO DESDE LOS AÑOS 70 HASTA HOY Y MENOS LLEVAR A JUICIO A LOS RESPONSABLES, MANTENIENDO A LA POBLACIÓN EN LA INDEFENSIÓN, SIENDO ESTE GOBIERNO ENCUBRIDOR DE LOS ANTERIORES GOBIERNOS.
El caso Radilla tuvo un gran impacto en el sistema jurídico mexicano, tanto por haber sido el primer caso significativo en el que la Corte IDH condena al Estado mexicano, como por contener órdenes para que en México se realicen cambios estructurales de gran importancia para la vida pública del país.
En primer lugar, al ser el de Rosendo RADILLA el primer caso en que la Corte IDH condena al Estado mexicano por violaciones graves a derechos humanos, ordenando una serie de medidas de reparación en concordancia con la gravedad de las violaciones, las autoridades mexicanas se vieron forzadas a establecer criterios para el cumplimiento de esta sentencia y de otras sucesivas que se emitan por parte de la Corte IDH.[1]
Hoy se cumplen cuarenta (40) años de la Desaparición Forzada de don Rosendo RADILLA PACHECO a manos del ejército mexicano en ese periodo de “Terror de Estado” (que para minimizarlo le llaman “guerra sucia”), aplicado contra los disidentes políticos en todo el territorio nacional.
Rosendo Radilla, es uno de los más de 470 detenidos desaparecidos del municipio de Atoyac de Álvarez y más de 650 en todo el territorio de Guerrero, sumados a los más de 820 en todo país tan solo de la década de los 70.
En todo México se llevaron -ejército federal mexicano, (Brigada de Fusileros Paracaidistas), policías judiciales estatales y federal y grupos paramilitares como la Brigada Blanca- a más de 820 ciudadanos, campesinos la mayoría de Guerrero y otros muchos de ellos jóvenes estudiantes de diferentes universidades del país, simpatizantes y sus familiares, que vieron cerradas las opciones democráticas para lograr cambios estructurales y optaron por el camino de las armas.
Rosendo, fue presidente municipal en Atoyac, promotor de centrales campesinas y de cafeticultores, fue ganadero y muy sensible ante las injusticias. La población de Atoyac le estima y respeta por su gran solidaridad. Promovió el primer hospital, el primer camión de basura, el primer edificio de la primera escuela primaria del lugar, entre otras obras sociales.
Compuso corridos sobre la situación social y los cantaba. Denunciaba las condiciones de pobreza y miseria, los movimientos sociales; a Genaro Vázquez y a Lucio Cabañas, de quienes fue contemporáneo, les compuso corridos.
El ejército, en uno de tantos retenes militares, lo bajó del autobús, Rosendo preguntó a los militares, “¿por qué me detienen?” solo le dijeron que “¡por componer corridos!” y el preguntó que si eso era delito, nuevamente le contestaron “¡pus no, pero mientras, ya te chingaste!”.
AFADEM, después de veinticinco años de promover por todos los medios jurídicos y políticos la búsqueda de Rosendo y todos los desaparecidos del país en las instancias nacionales, junto con la familia Radilla Martínez y la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos (CMDPDH), promovieron el caso ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos CIDH y esta ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos CoIDH por no haber acceso a la justicia en México.
Después de cuatro excavaciones en la zona del ex cuartel militar de Atoyac de Álvarez, donde fue visto por última vez Rosendo y donde fueron también desaparecidos más de cuatrocientos setenta (470) personas de Atoyac por el ejército mexicano, los palos de ciego como retraso intencionado de la Procuraduría General de la Republica (PGR), son evidentes.
La búsqueda de Rosendo es, la búsqueda de todos los detenidos desaparecidos de Atoyac; a Rosendo y a todos los desaparecidos, se les llevaron vendados de los ojos y amarrados de pies y manos al interior del cuartel militar y ahí pueden estar, en algún lugar, que solo los militares saben con certeza.
Estas excavaciones dan muestra de la nula voluntad política del ejecutivo federal de cumplir con la sentencia de la Corte Interamericana, haciendo como que cumplen, alargando, administrando el proceso de conocer la verdad sobre los desaparecidos y llevar a juicio a los responsables, como lo ordena la sentencia. Pues el Ministerio Publico de la Federación, no ha citado a declarar a los que saben Dónde están, a los involucrados en las detenciones arbitrarias, torturas y desapariciones de personas, protegiendo a los criminales, manteniendo la impunidad desde los años 70 hasta hoy.
El Estado mexicano, históricamente, aparenta que cumple con la sentencia de la Corte Interamericana, pero en la práctica no hay verdadera investigación del paradero de Rosendo y los más de cuatrocientos setenta (470) Detenidos Desaparecidos de Atoyac.
Rosendo Radilla Pacheco, ha logrado, aun detenido desaparecido, cambios muy importantes en las leyes mexicanas.
Rosendo Radilla Pacheco y los más de 820 detenidos desaparecidos son los constructores de la insípida democracia que hoy disfrutamos millones de mexicanos y que poco a poco nos van intentando quitar.
Rosendo Radilla Pacheco, vive en los ideales democráticos de todo el pueblo de México.
JULIO MATA MONTIEL
Secretario Ejecutivo de AFADEM
y vocal de comunicaciones de FEDEFAM